AVISO

AVISO (12/03/23):
Debido a la gran cantidad de juicios por jurados llevados a cabo en una decena de provincias de Argentina, la AAJJ dejará de publicar crónicas individuales por cada juicio y comenzará a publicar resúmenes mensuales

jueves, 22 de diciembre de 2016

TRENQUE LAUQUEN: último juicio de 2016. Condena por drogas

Con el veredicto unánime de culpabilidad del jurado, finalizó ayer en Trenque Lauquen el último juicio por jurados del 2016 en la Provincia de Buenos Aires.

Al acusado, Gonzalo Kazún, se lo llevó a juicio por el delito de vender drogas, especialmente en la ciudad de América. Su situación procesal se agravó cuando se comprobó, además, que algunos de sus “clientes” eran menores de edad.

Por ende, la fiscalía lo acusó por el delito de comercio agravado de estupefacientes vendidos a un menor de edad. El juez Marcelo Centeno, como es norma en todo juicio por jurados, instruyó al jurado por este delito y por los dos delitos menores incluidos que correspondían según la prueba y la figura elegida por el fiscal: comercio simple de estupefacientes y tenencia con fines de comercialización. Además de, por supuesto, la opción de no culpable.

El jurado, no obstante estas opciones, consideró culpable a Kazún del delito más grave y por unanimidad.

Debe destacarse el nivel que alcanzó la litigación de este juicio, tanto por la actividad de ambos abogados (el fiscal Fabio Alberto Arcomano y el defensor Horacio Samame) como por la del juez, Marcelo Centeno.

En efecto, hubo una excelente objeción del abogado defensor Samame que pudo cambiar la suerte del debate y que fue resuelta magistralmente por el juez: el menor de edad víctima del hecho (comprador de la droga) llegó detenido al debate por ser él ahora vendedor.

Juez Marcelo Centeno
La defensa objetó en el acto a dicho testigo y pidió su exclusión. El juez, a pedido fiscal, decidió retirar al jurado para resolver la objeción. Tal como marca la ley, a efectos de no prejuiciar fatalmente al jurado con la discusión de exclusión probatoria. El juez Centeno finalmente resolvió aceptar al testigo de la fiscalía y el debate siguió su curso.

Esta es otra buena muestra de cómo la justicia provincial eleva juicio tras juicio y día tras día el nivel de litigación y de preparación de los debates con jurados.

Párrafo aparte merecen los jurados titulares y suplentes: se quedaron largo rato hasta después de rendido el veredicto manifestando su satisfacción por la experiencia e intercambiando sus pareceres con el juez y las partes.

Con este juicio, cierra el 2016 como un año excepcional para el juicio por jurados en Buenos Aires y la Argentina.