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AVISO (12/03/23):
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sábado, 22 de octubre de 2022

QUILMES: Suboficial de Prefectura culpable de asesinar a su esposa. Los fiscales de Chubut que comenzarán con los juicios por jurados en su provincia asistieron al debate.

Data Judicial, firme junto al pueblo, dio la primcia

Por unanimidad, luego de deliberar por casi tres horas, doce ciudadanos quilmeños pronunciaron su veredicto en el juicio por jurados que se llevó a cabo contra un suboficial de la Prefectura Naval Argentina. 

El jurado encontró culpable a Carlos Alberto Ortiz del asesinato de su esposa en la casa que compartían, en la localidad de La Cañada. Pero el jurado descartó la agravante de violencia de género.

 


LOS HECHOS y LOS AUDIOS

 

El 26 de julio de 2015, Miriam Velázquez de 47 años, murió al recibir un balazo en la boca, luego de forcejear con su marido Ortiz, suboficial de la Prefectura. El hecho se registró durante una violenta discusión que la pareja mantuvo en la vivienda que compartían en la calle 885 de La Cañada, Quilmes Oeste, inmediatamente después de que regresaran de una fiesta realizada en San Francisco Solano.

El suboficial Ortiz llegó a juicio acusado del delito de “homicidio agravado por el vínculo y femicidio”. Sin embargo, el imputado sostuvo que fue la víctima quién habría logrado apoderarse de su arma reglamentaria calibre 9 mm y que él intentó quitársela, que forcejearon, y que accidentalmente se produjo el disparo que impactó sobre la mujer. Alegó así que fue un accidente.

Es fue la teoría del caso de los defensores oficiales Soledad López e Ignacio Tranquilini.
 

EL JUICIO


Los fiscales de Chubut fueron a ver el juicio
como parte de su capacitación ante el debut
del juicio por jurados en dicha provincia

 

El fiscal Videla


El fiscal Sebastián Videla logró desbaratar la teoría del accidente con dos pruebas claves. La primera fue la pistola Pietro Beretta 9 mm modelo 92 provista por la fuerza. Demostró el fiscal, a través del perito balístico, que es imposible que se escape un tiro por cómo funcionaban todos los seguros. Además, el balazo en la boca fue hecho a un distancia de más de 50 cm y de menos de dos metros. La tesis del forcejeo se caía a pedazos.

Otra mentira del acusado fue que él no tenía experiencia de tiro. El fiscal consiguió sus legajos de entrenamiento: era el mejor tirador de su camada, con 14 aciertos de 15. 

La estocada final llegó cuando el jurado escuchó los audios de 911 que el prefecto envió apenas ocurrido el hecho. En los dos primeros, le confesó el hecho a la policía: "Vengan que maté a mi mujer de un balazo. Soy prefecto y voy a ir preso".

Pero, en los otros dos llamados, cambió la versión y dijo: "Vengan con una ambulancia, por favor, mi mujer se está muriendo. Forcejeamos y se disparó un tiro"  

Pasadas las 7 de la tarde, llegaron las instrucciones del juez Alejandro Portunato, quien le informó al jurado las cuatro opciones (agravado por el vínculo, femicidio, culposo y no culpable).

Durante la deliberación, los jurados pidieron escuchar los audios de nuevo. Hubo momentos de tensión. Media hora después, salieron con su veredicto de culpabilidad por homicidio agravado por el vínculo.

El Código Penal de la Nación prevé una pena de prisión perpetua. El lunes será la audiencia de cesura a cargo del juez Portunato, del Tribunal Oral N° 3 de Quilmes.


Alivio entre las víctimas

Noticias Relacionadas:


- Data Judicial (22/10/2022): "Juicio por Jurados en Quilmes: por unanimidad 12 ciudadanos declararon culpable al autor de un femicidio en La Cañada". (Ver aquí)

- Diario Popular (27/07/2015): "Discusión de pareja con final trágico en La Cañada". (Ver aquí)

- El Chubut (22/10/22): "Fiscales de Madryn participan de juicio por jurados en Quilmes" (ver)



viernes, 13 de mayo de 2022

MERCEDES: El jurado condenó a la esposa que mandó a matar a su marido con un sicario. Una Mai Umbanda programó el crimen

La trama del crimen


Un hecho con ribetes tenebrosos y dramáticos fue juzgado ayer en Mercedes. Un asesinato que mezcló de todo: macumba, un matrimonio adinerado y desavenido de la zona núcleo agroganadera, una Mae Umbanda del conurbano planificando el crimen, sicarios, cómplices y el homicidio del marido por encargo (casi 10 mil dólares). 

El jurado condenó de manera unánime a la esposa de la víctima y al sicario. Irán a prisión perpetua, ya que el delito era homicidio agravado por el vínculo, por alevosía y por precio o promesa remuneratoria. El resto de la banda se declaró culpable en abreviado.

El hecho tuvo lugar en la ciudad bonaerense de 25 de mayo a fines del año 2014, cuando encontraron degollado al productor agropecuario Rafael Almiroty (68). 

Tal como la fiscalía pudo demostrar, la víctima no tuvo una muerte natural sino que hubo una conspiración impulsada por su esposa para asesinarlo, lo cual logró llevarlo a cabo tras contratar a un sicario.


LOS HECHOS


Una Mai Umbanda fue el cerebro
de la conspiración

Blanca Alicia Díaz Villalba y Rafael Almiroty estaban casados pero vivían prácticamente separados. Ella tenía su departamento en la Ciudad de Buenos Aires y él vivía en su campo de 25 de mayo. 

Díaz Villalba era muy devota de la religión Umbanda y frecuentaba a una Mai de Fuerte Apache que fue la que le dio la idea de deshacerse de su marido y quedarse con absolutamente todo. Iban a mandar al marido al Otro Mundo. En viaje sincrético y sin escalas a Yemanyá. Directo y non stop a Oxum, al reencuentro con Oxala en el Cielo de los Orishas. 

Convencida, entre las dos comenzaron a planificar lo que sería el homicidio de Almiroty con la ayuda de la hija de la Mai y su pareja, Aldo Omar Pérez, que fue el encargado de ejecutar a la víctima. Las reuniones habrían tenido lugar en Fuerte Apache.


Orixá

El día elegido fue el 22 de noviembre de 2014. Una vez muerto, Díaz Villalba comenzó con la simulación y llamó al 911 para decir que su esposo había sido robado y atacado, y se estaba desangrando. Inmediatamente la policía se presentó en el domicilio de la calle 28 casi esquina 103 de 25 de mayo. 

En la casa no se notaban aberturas forzadas ni desorden. Tampoco faltaban objetos. Lo único que los peritos no hallaron fueron el arma con la que habían degollado al productor agropecuario y su teléfono celular. Con un escenario tan extraño, la primera medida que tomó la justicia fue buscar pistas sobre el móvil del crimen y sus autores en los teléfonos celulares del círculo íntimo, cuyos integrantes ya habían pasado a ser sospechosos. 


Blanca Alicia Díaz Villalba.

A los pocos días, la Policía halló en la casa donde habían matado a Almiroty un maletín con 50 mil pesos, que era producto de una venta de animales que la víctima había hecho unos días antes. Es decir que el robo estaba descartado.

En ese momento los investigadores realizaron el entrecruzamiento de los llamados de los celulares familiares, lo que abrió el camino hacia el desenlace. Así, descubrieron que un hombre de 31 años, oriundo de Ciudadela (Fuerte Apache), había recibido dinero de parte de Blanca para matar a Almiroty. Y que un remisero de 28 años había trasladado al sicario hacia el lugar del asesinato.


La banda contratada es detenida en Fuerte Apache


LA INVESTIGACIÓN

En su momento, el caso pegó fuerte en todos los diarios nacionales. La gran periodista de policiales de Perfil, Nadia Galán, escribió esta brillante columna en 2014:

"Señora, queda detenida”. Esas fueron las palabras que escuchó Blanca Alicia Díaz Villalba (60) cuando llegaba a su estancia en la localidad bonaerense de 25 de Mayo, a 220 kilómetros de la Capital Federal. En esa misma ciudad, pero dos mes atrás, había aparecido muerto su marido con múltiples cortes en el cuello. Los investigadores creen que la viuda fue quien contrató a un sicario para terminar con la vida del productor agropecuario Rafael Almiroty, de 68 años, y por lo que habría pagado un anticipo de 65 mil pesos.

Los Almiroty son una familia conocida en 25 de Mayo. Rafael era productor agropecuario y administraba varias hectáreas de campo en la zona de Ugarte por lo que durante la semana vivía en su estancia “La Juanita”, en 25 de Mayo. Los fines de semana recibía la visita de su esposa, que reside en Capital Federal.

El 23 de noviembre pasado, Blanca llegó a la estancia y encontró a su esposo tirado en el piso del dormitorio sobre un charco de sangre. Los médicos y policías que arribaron al domicilio en la calle 28 y 103, tras el llamado el 911 de la mujer, constataron que el hombre no respiraba. También advirtieron que las puertas no habían sido violentadas y que todo estaba en su lugar. Sólo faltaba el teléfono celular de la víctima. Más tarde, los investigadores descubrieron un maletín con 50 mil pesos ocultos en la casa, por lo que el móvil del robo quedaba prácticamente descartado.

Después de dos meses de investigación, la Justicia consideró (basándose en las pruebas recolectadas en los distintos operativos y el resultado de diversas intervenciones telefónicas) que había elementos suficientes para sospechar que Blanca había contratado a dos hombres para matar a su marido. 

Se cree que la viuda habría contactado al remisero Walter Cartula, para que el 23 de noviembre realizara un viaje de unos 200 kilómetros desde la localidad de Merlo hasta su estancia “La Juanita”. Antes debía pasar a buscar a Aldo Osmar Pérez (31), el sicario.

Según se sospecha, la viuda le habría efectuado un primer pago de 65 mil pesos para matar al productor agropecuario. Se cree que el monto total a pagar era de 150 mil pesos, aunque no se habría concretado, explicaron fuentes de la investigación a PERFIL. Una mai umbanda habría sido el nexo entre la mujer y el killer.

Tras las rejas. El viernes 23 de enero pasado Blanca fue detenida por la Policía cuando llegó a 25 de Mayo con una de sus dos hijas. No se resistió. Puso sus brazos por detrás de la espalda y se subió al patrullero.

Al mismo tiempo, en el Conurbano, se realizaban otras dos detenciones. Una de ellas en el Complejo Habitacional Ejército de Los Andes, más conocido como Fuerte Apache, donde vivía el sicario Aldo Pérez. En su casa secuestraron 15 cuchillos de diferentes tamaños y tres celulares. 

En la localidad de Merlo, fue apresado Walter Cartula, de 28 años. La Justicia lo considera “partícipe necesario” del crimen. “Ofició de chofer del sicario”, según explicaron los investigadores. El Peugeot 504 negro que se habría usado para efectuar el viaje quedó en poder de la Policía.  

“En primera instancia no se sabía qué había sucedido porque el asesinato estaba bien ‘disfrazado’ y podía ser un suicidio. Era un hecho muy complejo y hoy tenemos el agrado de esclarecerlo”, dijo a la prensa local el jefe distrital de la Policía, Carlos Grosso.

La principal hipótesis sobre el móvil del crimen es económico, pero no se descarta que un engaño amoroso haya motivado a la mujer a tomar esta fatal decisión. El lunes pasado los tres detenidos se negaron a declarar.


EL DEBATE

El juez Ignacio Racca junto a su equipo:
Agustina Basualdo, Belén Pagani
y Corina Villalba


El juez Ignacio Racca condujo el debate -su primer juicio por jurados- de manera extraordinaria. Era un caso muy difícil y logró hacerlo en dos días y medio, gracias a la planificación estratégica de todo su equipo en el juzgado. Sólo fueron a juicio la viuda y el sicario. El resto de la banda se declaró culpable en abreviado.  

La fiscalía pudo probar fehacientemente los cargos por los que acusó a ambas personas. El abogado Humberto Pastor intentó lo que pudo pero no hubo caso.

El jurado, tras una deliberación de dos horas, rindió un veredicto unánime de culpabilidad por todos los cargos. Declaró culpable a Blanca Díaz Villalba como instigadora del homicidio doblemente agravado por concurso premeditado y por mediar promesa remuneratoria de su esposo Rafael Almiroty.

Al sicario Aldo Omar Pérez lo declaró culpable de homicidio agravado por alevosía, por haber sido cometido entre dos o mas personas y por mediar precio o promesa remuneratoria.

Ahora, el juez Racca deberá citar a las partes a una nueva audiencia - ya sin la presencia del jurado - en el que deberá determinar la pena aplicable a cada uno de los condenados, aunque la pena prevista para ambos delitos es la prisión perpetua. 

Noticias Relacionadas: 

- Clarín (15/5/22): "Condenan a una mujer que mandó a matar a su marido: la idea se la dio una mai umbanda" (ver)

- Clarín (27/01/2015): "Le pagó a un sicario para matar a su marido y luego fingió un robo" (Ver aquí)

- ADN Digital (26/01/15): "Cayó “viuda negra” que mandó a matar a su marido en 25 de Mayo" (ver)

- Alvear Ya (26/01/2015): "25 de Mayo: el productor agropecuario Almiroty fue asesinado por un sicario contratado por su esposa"(Ver aquí)

- Perfil (31/01/2015): "Contrató a un sicario para que mate a su marido y le pagó 65 mil pesos" (ver)

- Perfil (11/6/22): "Perpetua para la viuda que ideó un plan con una mai umbanda para matar a su marido" (ver)


miércoles, 10 de noviembre de 2021

MENDOZA: PERPETUA PARA EL ASESINO QUE EJECUTÓ DE UN TIRO A LA QUERIDA VERDULERA DE SAN MARTÍN, CARINA RODRÍGUEZ

Genarlo Lucero, perpetua

Un jurado de San Martín, en Mendoza, declaró culpable por el homicidio criminis causa de Carina Rodríguez a Genaro Lucero, de 42 años y frondoso prontuario delictivo. Fueron tres días de juicio en donde la defensa pedía que se lo condenara por el delito menor incluido de homicidio en ocasión de robo. No fue así y, tras cuatro horas de deliberación, el jurado determinó la responsabilidad de Lucero, quien deberá cumplir la pena máxima impuesta por la jueza Victoria Franano. 


"Estoy arrepentido por lo que ha pasado, sólo fuimos a hacer una plata para comer y pasó un accidente", se excusó Genaro Pantaleón Lucero. "No tenía plata para comer, para darle de comer a mi familia y fuimos a hacer una moneda". 

"Le dije que no le iba a hacer nada, que sólo quería plata. La señora (Rodríguez) empezó a gritar y se me abalanzó encima y yo la empujé con las dos manos. Ahí fue cuando sentí la explosión y me quedé en shock". "Yo me quedé un rato mirándola y salí, me subí al auto y nos fuimos. Ahí ya no me acuerdo nada más".

El matador explicó en su versión que el disparo fue sin intención y, entre lágrimas, sostuvo que está arrepentido: "Le pido perdón a mi madre y a mis hijos. Todas las noches cuando me voy a acostar pienso en mis hijos y en esa nena", formuló en referencia a la hija de la víctima.


El resto de la temible banda. 

Por este crimen hay otros tres condenados a 15 años de prisión, que evitaron el juicio y fueron a un abreviado por homicidio en ocasión de robo. Ellos son Nicolás Lucero Jofré, hijo del acusado, David Fabián Bravo Chaile y Gonzalo Oscar Bravo Corso. Ellos tres reconocieron la autoría. La defensa de Genaro Lucero no abrevió y fue a juicio por jurados. 

La prensa local dio cuenta de los antecedentes de Lucero: "Su historial delictivo causa pánico. Tiene al menos 9 causas por robos agravados, varios de ellos cometido en poblado y en banda, también fue acusado por amenazas y lesiones. Pero como si esto fuera poco, en diciembre del 2014 fue acusado de intento de femicidio con un abuso sexual agravado. Fue detenido pero aún así luego recuperó la libertad el 23 de marzo" (Sitio Andino).

LOS HECHOS


El 21 de noviembre del año 2019 Carina Rodríguez se encontraba en la verdulería llamada "Nico", localizada en la avenida Lima y calle Soler, junto a su hija. De pronto, cuatro hombres a cara descubierta irrumpieron en el comercio y fueron directamente a amenazar con un arma de fuego a Rodríguez para que les entregara todo el dinero. Como no había tanto dinero, también tomaron una balanza, un parlante y unas botellas de vino que cargaron en el Peugeot 307 gris con el que llegaron al establecimiento. 

Según la reconstrucción realizada por la fiscalía, Lucero antes de retirarse le apuntó con el arma en la cabeza a Rodríguez y la ejecutó. A sangre fría y a cara descubierta. 

Tras el disparo -y la posterior huida de los delincuentes- los vecinos alertaron al 911. Policías y una ambulancia del servicio de Emergencias acudieron al lugar, pero no pudieron hacer nada por la víctima, muy querida en la zona. Horas más tarde, gracias a las tareas de rastrillaje realizadas por las fuerzas de seguridad provincial, se pudo ubicar el Peugeot en el que se fugaron los 4 matadores en el barrio de Villa del Carmen. En un domicilio ubicado en ese mismo barrio fueron localizados y aprehendidos Lucero, su hijo y Bravo Chaile. Dos semanas después, Bravo Corso - identificado como el chofer - fue aprehendido mientras esperaba en la parada de un colectivo. 


Carina Rodríguez murió en el acto. 


TEORIAS DEL CASO:
FISCALÍA Y DEFENSA


La fiscalía estuvo representada por Oscar Sívori y Martín Scattareggi, de destacada actuación, quienes sostuvieron que el imputado asesinó a la verdulera con la intención de alcanzar la impunidad en el asalto. 

El sentido alegato de apertura del fiscal Oscar Sívori duró sólo tres minutos. Lo suficiente para decirle al jurado que Lucero le quitó la vida a Rodríguez por "una balanza, un parlante, algunas pocas monedas y tres botellas de vino". Agregó que "no había necesidad" de asesinarla, ya que habían cargado los elementos sustraídos al vehículo y estaban por darse a la fuga. También explicó que el acusado y sus cómplices habían ido a comprar al lugar momentos antes para relojearlo. Allí se aseguraron que la mujer estaba sola, junto a su hija que en ese entonces tenía 12 años. La pobre niña presenció la ejecución de su madre de un tiro en la frente. 

La defensa, representada por el abogado particular Pedro Sosa, tuvo como teoría del caso negar que haya sido un homicidio criminis causa, dado que no se habían dado los presupuestos exigidos por la ley. Para esto, se apoyó en la condena que recibió el resto de la banda por el delito de homicidio en ocasión de robo y pidió el mismo trato para su representado. No le fue nada bien.

VIDEO: ALEGATOS DE APERTURA



La Jueza Franano.


VIDEO DEL VEREDICTO




Noticias Relacionadas: 

- Diario El Sol (08/11/2021): "Juicio en San Martín: mató a una verdulera en un asalto y busca zafar de la perpetua". (Ver aquí)

- Diario El Sol (08/11/2021): "Mató una mujer en un asalto y confesó: "Estoy arrepentido, sólo fuimos a hacer plata para comer" (ver)

- Mendoza Online (10/11/2021): "Crimen de la verdulera: el condenado recibió prisión perpetua". (Ver aquí)

Diario Los Andes (10/11/2021): "Prisión perpetua para el hombre que mató a Carina Rodríguez en un asalto en San Martín". (Ver aquí)

domingo, 19 de septiembre de 2021

NEUQUÉN: Sara Miranda culpable por la tortura y muerte del viejo Roque Mora. Le robó $ 50 mil para pagar deudas del Casino

Sara Miranda, perpetua.


Sara Miranda, de 47 años, fue declarada responsable del delito de homicidio doblemente agravado por ensañamiento y criminis causa, en concurso real con robo agravado por uso de arma, contra el viejo Roque Mora, de 73 años, ocurrido en Plottier a mediados de julio de 2020.

LOS HECHOS

Ese día, la mujer merodeó fuera de la vivienda de Mora y aguardó el momento en que quedó solo para abordarlo con un único propósito: robarle dinero para saldar sus deudas por el juego, que la tenían comprometida con quien le alquilaba su vivienda y con el casino.

Al ingresar, intimidó a Mora para que le indicara dónde podía hallar sus ahorros: Mora se opuso a hablar y la acusada, con gran fuerza, lo redujo en la cama y lo torturó hasta matarlo. La autopsia reveló 117 lesiones.

El cuerpo del viejo Mora fue hallado en una cama de dos plazas rodeado de botellas rotas, tanto el pico, cuello y las bases. En uno de ellos, que era de vino, se encontró una huella dactilar compatible con la única acusada: Sara Miranda de 47 años, que el día del homicidio fue a pedirle trabajo a Mora. Ella había cuidado a su esposa mientras estaba enferma. Las cámaras de seguridad la mostraron entrando a la casa y ella terminó por confesar el hecho, pero por motivos distintos.


Fiscal Agustín García

Luego, limpió el lugar y huyó con el dinero, el que utilizó para cubrir deudas que tenía con algunas personas.

"Quedó claro que el señor Mora era una persona no solo anciana, lo que lo torna vulnerable, sino que tenía una serie de patologías que lo hacían aún más débil: hipertensión, diabetes, problemas de columna, de movilidad, operaciones de corazón", señaló el fiscal Agustín García. 

Además, subrayó: "Nos dijeron que no íbamos a poder probar la saña. A Mora le cortaron un pedazo de oreja, le dieron botellazos en la cabeza, le arrancaron un diente, le fracturaron dos dedos, le generaron lesiones punzantes y cortantes. Mora sintió todo lo que sufrió".


LA DEFENSA



Las defensoras de Sara Miranda, Celina Fernández y Jorgelina Montero, solicitaron al jurado popular que la declare no culpable.

Montero planteó que la investigación estuvo cargada de prejuicios y de sesgos. Dijo que los policías leyeron la escena del crimen en clave de que hubo una "viuda negra", una expresión que utilizó uno de los testigos y un estereotipo sexual asignado a las mujeres, y que en base a ello se procesó la recolección de evidencia en la casa de la víctima. 

La defensora Fernández, a su vez, cuestionó que tanto la fiscalía como los querellantes Mendaña y Lucero utilizaran el término "tortura", que es una figura jurídica que no forma parte de la calificación por la que se la acusa a Miranda. Criticó el uso de términos morbosos como que fue un crimen "salvaje", que está asociado a la animalidad. Remarcó que la intención de la imputada fue ir a pedirle trabajo, no robar.

La defensa, entonces, no cuestionó en sí la autoría del hecho, sino que apuntó a las circunstancias. Dijo que no buscó robarle, sino que fue a verlo porque quería trabajo. Ella había sido su empleada y estuvo al cuidado de su esposa. Planteó que hubo una agresión sexual y que en ese contexto ocurrió el homicidio. 

No pudo ser acreditado nada de esto y el jurado descartó esta teoría del caso por un veredicto de 10-2.

Leer noticias aquí:

- Diario Río Negro: "Crimen de Plottier: el jurado declaró culpable a Sara Miranda" (ver)